miércoles, 29 de junio de 2011

Relojes

En cuatro años me ha hechos dos regalos, yo nunca le he pedido nada, con lo que nunca me ha regalado nada... El primero hace cuatro años fue este


Ayer apareció en casa con este otro



Soy muy puntual... Con lo que no entiendo que querrá decir con esto

martes, 28 de junio de 2011

Estoy sola

En principio eran 63, ahora sólo han sido treinta y tantos... Ayer la resistencia abandonó, ya no pudieron más, me pidieron disculpas, me desearon buena travesía, recogieron sus cosas y se fueron entre lágrimas.
Me he quedado sola... Y tengo que resistir...
Cada día me cuesta más, ¡como los echo de menos!

domingo, 26 de junio de 2011

La mochila

A ver, te enseño a hacer la mochila, así no, de esta forma. Ahora vamos con el saco dentro de su funda...
.- tía no cabe
-¡A cabido siempre.!
.- pero es demasiado grande
-¡Mira! esta conversación yo la he tenido ya, pero siendo yo el sujeto... ¡y no me mires así!, ¡esta hecho para que quepa y cabe!
Luego he llamado a su monitor del campamento y le he dicho que voy... o eso o me veo al niño con el saco enrollado al rededor de el, cada vez que vayan de acampada.

viernes, 24 de junio de 2011

Espera

Yo, que ya soy mayor, recuerdo cuando no existían los móviles y para cualquier cosa te llamaban a casa. Recuerdo como de adolescente, esperaba horas sentada frente al teléfono una llamada de alguien especial, no me movía no fuera a ser que cuando levantase mis posaderas de la silla sonase el teléfono y lo cogiera alguno de mis hermanos o mis padres... o saliese de casa y no hubieran podido localizarme.
Este ritual tan adolescente, que sé que no soy la única que lo ha hecho, a pasado a mejor vida. Ahora vivimos pegados al teléfono móvil y si no te llaman es que no han querido llamarte, no que no hubiera nadie en casa o cogió otro el teléfono y colgaron.
El ritual "adolescenteril" yo lo sufro con mi correo electrónico, me paso horas esperando a que me entre un mensaje... si no entra empiezo a elucubrar "se ha desconectado", "es que esto no va", "a perdido mi dirección", "tiene gente y no me puede contestar", "hoy llevará un día de perros", "Se ha ido de fin de semana "No, fin de semana no, vacaciones", "es que le dan más que al común de los mortales, por eso no me ha escrito durante tres meses",... Un sinfín de excusas, que se me ocurren muchísimas más, cuando la única verdad es que el que no te quiere escribir, no te escribe

martes, 21 de junio de 2011

LO SIENTO

Ayer no sólo fui borde, además fui una desaprensiva con alguien que realmente no se lo merecía.
Y aunque me perdone no se si podrá olvidarlo.
LO SIENTO.

lunes, 20 de junio de 2011

Confirmación

Confirmado:
A las 22,05 de la noche de hoy día 20 de junio del año de Nuestro Señor 2011, puedo confirmar que oficialmente soy una "Cabrona".
Y ¡que me esta gustando ser tan borde!

viernes, 17 de junio de 2011

27 pares

Recuerdo una película que se llamaba 27 vestidos. Yo nunca he sido dama de honor con lo que en mi guardarropa no existe ni uno sólo de estos ridículos vestidos, además aquí como que "no se lleva", pero todo se andará.
Lo que si que tengo son 27 pares de zapatos de verano y digo zapatos y solo de verano por que a esto hay que sumarle zapatillas sport, botas de montaña y las zapatillas de playa o piscina incluidas dos pares para río y otros tantos de invierno.
Mi "novio" se queja de que no dejo espacio para nadie en el zapatero, con lo que con mi cómplice zapateril empecé ha hacer una escarda a fin de aligerar el armario zapatero, ¡no pudimos tirar ni un sólo par! ¡todos en perfecto estado de revista!.
Conclusión: habrá que hacer otro armario o comprarse otra casa

lunes, 13 de junio de 2011

SAN ANTONIO OTRA VEZ

He tenido una video conferencia con mi amigo el de ultramar... Le he pedido encarecidamente que me haga propaganda allí donde se encuentra, que aquí la cosa esta muy mal, a lo que me ha contestado que suba a San Antonio porque a el no le gusta para mi el ganado de aquellas tierras.
Con lo que en breves me encontraré camino de San Antonio por recomendación de dos sacerdotes... el uno que suba a pedir algo mejor de lo que tengo y el otro que haga el favor de comprarle rosquillas.
¡Es mi sino!